Un a-cuerpo, in-tacto, a-territorial. Un sin nada, un infinita, unas infinitas extensiones de pulsaciones. Pulsión como línea de fuga. Un clinamen a la satisfacción del cuerpo al placer. Del placer al cuerpo, sin rostro y con texturas. En el sueño de fuga despierta el deseo. La mirada fija al cielo, en el fondo negro titilan…