Amor al monte

[Tercer lugar Concurso Literario Escolar 2025, categoría cuento]

Amo vivir en Santiago, sobre todo por donde vivo: tengo los paraderos enfrente, el metro cerca, un minimarket de confianza, supermercados a la par y muchísimas cosas más que me generan comodidad… Pero extraño sentir el cielo anaranjado mientras riego mis siemprevivas, escuchando a mi madre a lo lejos hablar, junto a esa paz, que acompaña aquel turpial y su canto inconfundible, y, en un instante, sin darme cuenta, que el anochecer me arrope. Miro al cielo, sin espacio por tantos destellos, junto a una luna inmensa que te hace querer soñar, acompañado, por supuesto, por ese característico “cri-cri, cri-cri”, como proclamación del monte y el sereno acogedor…

Me corrijo: me gusta vivir aquí… pero es el campo al que amo.