[Número 43 – 2022] Querida mía: He preguntado por ti, y no te he encontrado. Tu nombre hace ecos en las bocas necias de engendrar palabrería. Retumban en las murallas, se lanzan discordes y quiebran tu amado silencio. Y desde mi centro, no oigo nada, querida. II Qué fantasías de sombras fuiste a habitar. Tu mundo mágico…
